El Pulgar del esquiador, ¿sabes cómo tratarlo?

Hoy queremos hablar sobre la lesión del Ligamento Colateral Cubital de la articulación Metacarpo-Falángica del primer dedo, conocida por su denominación común “lesión del pulgar del esquiador”. Si bien no es una lesión tan frecuente en el esquí como puedan serlo las de rodilla, sí es una lesión que puede causar molestia y que debe ser tratada para evitar un empeoramiento.

Lesión del pulgar del esquiador

El ligamento colateral cubital (LCC) de la articulación metacarpo-falángica del primer dedo es un ligamento que une el cuello del metacarpiano del pulgar con la base de la primera falange. El LCC estabiliza la articulación del pulgar y desempeña un papel fundamental en las funciones de dicha articulación, cuya principal acción es realizar la pinza.

El pulgar es un dedo especialmente vulnerable por su posición en la mano. Al estar separado de los otros dedos, en un traumatismo, es relativamente viable se doble o se estire hacia atrás, lo que puede dañar la articulación. Si bien esta lesión puede darse en varios deportes, o incluso en algunas circunstancias de la vida cotidiana, su prevalencia entre los esquiadores es tan elevada que se la conoce como “pulgar del esquiador”.

Cómo se produce

Esta lesión se produce por un estiramiento excesivo de los ligamentos del pulgar al caer sobre la mano abierta mientras se sujeta un palo de esquí. En este momentos se produce una separación excesiva del pulgar que puede ser suficiente para desagarrar el ligamento. La lesión puede tener distintos grados, produciéndose desde un esguince hasta una rotura completa del ligamento.

Síntomas

Los síntomas de esta lesión suelen producir:

  • Dolor en la zona del pulgar.
  • Hematoma o inflamación, especialmente en la zona entre el pulgar y el índice.
  • Dificultar para realizar ciertos movimientos, como el de pinza o el lanzamiento de objetos.

Tratamiento del pulgar del esquiador

Un tratamiento adecuado de la patología del pulgar del esquiador es fundamental para la correcta recuperación de la articulación.

Los esguinces más leves pueden tratarse mediante la inmovilización con férulas durante un corto periodo de tiempo, pudiendo tras esto realizarse alguna sesión con un fisioterapeuta. Esta férula podemos encontrarla ya hecha o bien realizarla a medida.

En casos de rotura de este ligamento seria necesaria la intervención quirúrgica.

Prevención

Para prevenir el pulgar del esquiador, existen férulas específicas para ello. Aunque lo más habitual es que se usen cuando el usuario ya ha sufrido previamente esta lesión o tras que se haya producido para proteger la zona al volver a la práctica de esquí.

También es importante agarrar los palos de esquí de tal forma que puedan soltarse fácilmente en el caso de una caída.

Si este invierno has sufrido esta lesión o si otro movimiento te ha producido dolor en la zona del pulgar, no dudes en pasarte por Ortopedia BCN para que podamos asesorarte. Recuerda que, si una lesión no es tratada a tiempo, puede conllevar un agravamiento no deseado.

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